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Nadie sabe cómo, por qué o en qué momento comenzaron a aparecer personas con habilidades especiales. Gente, que, sin comprenderlo, llevaban dentro suyo la capacidad de hacer posible lo que una vez, la humanidad, creyó ficción.

Algunos ignorantes especulaban que todo era obra de Dios, o del demonio. Otros, que se trataba de la evolución humana.

Pero fuese lo que fuese, la sociedad marcaba a esa minoría como “extraños”. Aunque las apariencias fuesen iguales; aunque los dedos, ojos y cabellos fueran de un humano, les cazaban y devoraban sin misericordia. Porque el humano siempre temerá a lo desconocido, y por ello, lo destruirá.

Mucho tiempo los niños con habilidades eran escondidos por sus padres; hasta que, por algún error, les descubrían y tanto como hijos, que, como padres, eran severamente castigados. Algunas veces con la muerte, otras con tortura, pero siempre era una tragedia.

Mas tal destino cruel cambió con la llegada de una noticia escalofriante (escalofriante, sí, pero sólo para aquellos que ignoraban la realidad).

Un día, miles de niños y adolescentes de todas partes, desaparecieron de la noche a la mañana. Un sinfín de investigaciones se abrieron, y el deseo de los detectives y escritores se llenó.

¿Qué había sucedido? ¿A dónde habían ido? ¿Por qué se fueron? ¿Y por qué los padres se negaban a hablar?

Todos aquellos adultos que tuvieron una pérdida, fueron acusados de cosas horrendas por personas parlanchinas, sometidos a múltiples entrevistas por policías de sus naciones. Mas estos, siempre se negaron a hablar. O en todo caso, contaban mentiras a la prensa. Historias descabelladas que sólo un loco podría pensar. Pero nada llegó a más de eso.

Sus hijos, simplemente habían desaparecido, y lo aceptaban.

Pero todo lo que te estoy contando, pasó hace muchos, pero que muchos años. Justo en el principio de un Holocausto. 1939.

 

La noticia poco a poco fue pasando desapercibida, pues había algo mucho más grande a lo cual ponerle atención. Algo terrible y grotesco, que se avecinaba con el olor de sangre y carne desperdiciada.

Los años pasaron, y la historia de los niños que un día desaparecieron, quedó en el olvido. O en cuentos de hadas que los abuelos usaban para asustar a sus nietos.

Pero eso no quería decir que tal hecho, nunca ocurrió…

Y entonces ¿Qué fue lo que pasó en realidad? ¿A dónde fueron?

 

Preguntas que ya nadie tenía en mente, fueron revividas por una nueva “tragedia”.

 

2015.

 

Sale a la luz rápidamente la noticia de un asesinato.

Un hombre, de mediana edad, arrebató la vida de un muchacho de tan sólo dieciséis años, al ver que éste, se transformaba en un lobo. El miedo invadió la mente, el cuerpo y el alma del adulto, que, sin pensarlo, le disparó, matándolo al instante.

La persona fue internada en un hospital psiquiátrico por su testimonio, y los padres lamentaron su perdida a más no poder.

Nunca se reveló la identidad del muchacho.

 

2018.

 

Noticia fatídica vuelve a golpear el mundo escondido, con la pérdida de otro inocente.

Esta vez se trató de una pequeña, que sólo buscaba divertirse en casa de una amiga suya, mostrándole que podía animar peluches, o cualquier objeto que lograra tocar.

Cuando los padres de la menor vieron como su casa estaba infestada de muñecas que se movían de un lado a otro, y dibujos que salían de las hojas blancas del cuaderno de la amiga de su hija, la niña desapareció.

 

No salió nada a la prensa, ni siquiera en los diarios locales. Simplemente, se esfumó. Y ni siquiera sus propios padres soltaron alguna palabra.

 

2019.

 

La historia se repite.

Miles de niños menores de los 18 (o en su cumpleaños), una noche, desaparecieron. Y esta vez, sí fue un escándalo.

Padres desconcentrados, multitud en pánico, creyendo que se trataba de secuestros. Oficinas policiacas a reventar y otra vez, los escritores del misterio babeando por la verdad.

Pero todos se quedarían así, con un millón de preguntas y ninguna respuesta; pues los niños, habían llegado a diferentes bucles de tiempo.

 

Sí, diferentes bucles en el tiempo, creados por criaturas majestuosas, que daban su existencia misma por la protección de aquellos niños con peculiaridades.

Ymbryne, es el nombre que recibían aquellas mujeres con la capacidad de manejar el tiempo para crear un día interminable, y a su vez, transformarse en magnificas aves.

 

Cuatro años antes de la repetición, varias Ymbryne se reunieron tras enterarse de la muerte del primer Syndrigast (nombre que se le da a las personas que poseen peculiaridades).

Alteradas, concordaron que era tiempo de reunirse otra vez; tiempo, para crear diferentes bucles dentro de los próximos cuatro años, que cuidarían hasta el momento preciso. Hasta esa noche en el 2019, que llevarían a todos aquellos Syndrigast, a los años pasados.

Y así fue. Esperaron el tiempo justo, cumpliendo con todo lo que habían predicho. Separando a los niños en sus bucles.

 

Y aunque fueron en total siete bucles generados, sólo nos enfocaremos en uno.

 

Viernes, 1 de octubre del 2017.

 

El bucle se rompió.

 

Varios niños aparecieron en el jardín de una enorme casa, con habitaciones incontables y suficiente espacio para una multitud.

 

Una semana les fue otorgada para comprender lo sucedido. La mayoría acepto al instante, pues sólo eran niños.

Mas algunos, insistían en regresar…

Pero al final, aceptaron.

 

Viernes, 11 de octubre del 2017.

 

Un nuevo bucle nació.